El primer día había 3 pardillos y cada uno de ellos escribió una prueba para que la hiciese otro pardillo. En el momento en el que acabaron de escribir, los monitores dijeron un refrán que era: “no hagas a los demás lo que no quieras que te hagan a ti” y entonces los pardillos tuvieron que hacer la prueba que habían escrito ellos mismos. El segundo día otros pardillos tuvieron que llevar la ropa del revés durante el día siguiente. Y el tercer día, como había muchos pardillos, nos hicieron un pase de modelos, pero las chicas pardillas vestidas de chicos y los chicos pardillos vestidos de chicas. Esa fue la hora de los pardillos que más me gustó de la semana.
A mí me gustó mucho la hora de los pardillos, porque me reía mucho, aunque a mí no me pusieron ninguna “P” de pardillo y no quería que me la pusieran.
Bueno, me voy. Un beso muy fuerte. Adiós. De Alba.
2 comentarios:
Deveria ser muy guay
Me hubiera gustado estar allí
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